domingo, 8 de mayo de 2011

Cafecito con azúcar



Hice un pequeño experimento hace unos días, el cual consistía en ver cuanto tiempo resistía sin tomar café.

 Existe un dato muy curioso acerca de mi NO adicción, yo diría mas bien, afición por el café, no se si los medios de comunicación y la mercadotecnia excesiva que recibo día con día, me haga sentir esa necesidad hacia el café, pero a partir que tengo un poco de memoria, recuerdo que me gustaba, desde edades tempranas; primero el aroma, segundo por la prohibición que representaba, por ser una bebida no apta, para personitas menores de 10 años de edad. Cuando ya fue legal, mejor dicho, socialmente aceptable en mi casa  ya podía tomar café, el sabor y la sensación que produce esta bebida en mis receptores del gusto es indescriptible, es como una fiesta con amigos de confianza, sabiendo que no tienes hora para llegar a tu casa y  que si quieres puedes quedarte a dormir, bueno esa es mi sensación con el café.  

En edades mas, digamos recientes, sino tomo café siento que no despierto, me siento cansada, somnolienta, leeennntaaaa, así que ya sea con leche, con sustituto de crema para café, con azúcar o sin ella o solo con agüita caliente muy caliente, que tenga que soplarle y salga el vaporcito perfumado de  (suspiro) café, es delicioso.

Entonces al ver que sin café en las mañanas como que medio funciono, me cuestione: ¿Seré adicta al café o solo es de que me gusta mucho?

Mi rutina del café, no adicción, es una taza por la mañana y una taza por la noche, todos los días, sin excepción y no por mi, pero si no estoy en mi casa y me encuentro en alguna visita familiar o visita social, siempre te ofrecen café, lo cual es realmente conveniente para mi y mi NO adicción, eso no me hace adicta ¿o si? Obviamente hay días que no tomo café… bueno o que solo tomo una taza al dia, habeces los domingos no me da tiempo, por que tengo que ir a misa y pues o me peino o tomo café, bueno también existe la posibilidad de despertarme mas temprano, pero como NO soy adicta al café, bien me puedo dormir en misa.

Pues pase todo un dia sin tomar café, en la mañana tome un rico licuado de mango, en verdad que lo disfrute y no sentí ansiedad por no poder beber café, el dia se desarrollo normal, Sali con mis amigos, regrese a mi casa temprano y a la hora de la segunda taza de café, ya me sentía un poco ansiosa, quería sentir ese sabor que no tiene ninguna otra bebida, mientras iba avanzando la noche, deseaba mas que nada tomar un café, pero me resistía,  aun así mientras veía televisión me imaginaba poniedo agua caliente en mi pequeña taza, dos cucharadas de azúcar y una de café, mietras veía el avance en las noticias, me imaginaba el movimiento de la cuchara mezclando los ingredientes, casi podía oler ese aroma tan delicioso, sentí el vapor en mi cara, ese olor, me imaginaba  poniéndole coffee mate, imaginaba como sorbia un pequeño trago y como este pasaba por mi lengua  hasta mi garganta….


Deje de imaginar y me prepare un té de manzanilla, según el empaque del té era libre de cafeína, sin internet a las once ya tenia mucho sueño así que me fui a dormir deseando mas que nada que fuera ya el otro dia, para:  1. Tomar café y 2. Probarme que puedo pasar un dia sin café, así que no , yo no lo vi como una adicción.

2 comentarios:

  1. Yo no soy adicto al café, soy adicto a la cafeína.

    Me hiciste recordar que cuando llegó mi pubertad, a mi padre le preocupaba que en los bufetes dejaran de considerarme niño y le cobraran más. Así que cuando llegaba el mesero preguntando "¿Café?" él contestaba "Sí, para todos menos para el niño". Siguió haciéndolo hasta mis 17 años más o menos.

    ResponderEliminar
  2. Yo soy mas de té, pero si de café se trata no me diego a una buena taza de café cargado y con mucha azucar, dos cucharadas también. Yo pasé 7 meses sin café y nadie murió, Recientemente lo reincorporé a mi rutina diaria y la verdad es que le da un toque especial al día, si estás triste, contenta, sola o acompañada nunca viene mal una tacita :D

    ResponderEliminar